Procesando...


Pedro del Castillo funda Mendoza

Dios te salve, Señora, garza de luna austral
abanico de nieve sobre el valle de Guentata
y sobre el hierro y los caballos de hierro
y sobre nuestra sangre de hierro que se apaga
en estas tierras desoladas y puras.
Oh Madre, oh paloma crecida sobre la cordillera!
En este oscuro palomar te nombro.

Soy Pedro del Castillo y crucé el ancho mar
y crucé los desiertos
y arrastré las banderas de la ira y la piedad
para traer a esta oscura garganta del agua
bajo los altos montes la Harina de tu vientre.
Yo, Pedro del Castillo,
en el nombre y servicio de tu hijo, el LLagado,
pueblo y fundo estas provincias de Cuyo
barridas por el silencio de las piedras eternas
y el canto de los pájaros australes.
Levanto aquí la casa del hombre y se endurece
la cal de la mañana sobre las serranías.

Soy Pedro del Castillo, fundador, bala y uva,
madera de la cruz y ceniza del rancho.
Aquí fundo y reparto la tierra y estos indios
que son naturaleza, Verbo y dulcísimo piel
y el pan reparto y estas claras hierbas de América
bajo el aire en que sube la Purísima Garza.